Ofrecer una propiedad en renta se ha convertido en una fuente de ingresos para cientos de personas y familias, para incursionar en este mercado –sin morir en el intento– necesitas:

1. Definir un precio razonable

Close up of a hand on a calculator

Un precio exorbitante e injusto no interesará a nadie. Por lo tanto, una manera fácil para establecer un valor razonable es comparar tu propiedad con otras similares, ubicadas en las cercanías. Este trabajo ya no es tan complicado como antes, por Internet puedes acceder a vastos catálogos inmobiliarios y filtrar los resultados que deseas.

2. Tener un inmueble que sea presentable

inmueble-limpio

Siempre que haya un interesado, es necesario tener la propiedad en las mejores condiciones. Si se tiene que invertir un poco para mejorar su estado, se podrá elevar un poco el precio de la renta para recuperar el dinero. De todas maneras, lo principal es siempre demostrar la mejor cara de la vivienda y destacar, siempre que posible, las ventajas de vivir en ella.

3. Conocer al inquilino lo más posible

conocer-inquilino

Además de definir el precio, los días de pago y las condiciones que pones para rentar el inmueble, es muy importante saber quién es tu futuro inquilino. Por ejemplo, pregúntale cuál es su profesión y solicítela un comprobante ingresos, lo cual te permitirá ver si podrá pagar la renta. También pide referencias personales e intentar obtener datos de un anterior arrendador para ver si el inquilino es realmente fiable.

4. Recurre a profesionales para elaborar el contrato.

Inmobiliaria de la costa- Monteria, cordoba

Inmobiliaria de la costa- Monteria, cordoba

El contrato de arrendamiento es un documento eficaz para evitar problemas legales. Por tal, es siempre recomendable acudir a la asesoría de un abogado para la preparación de este contrato.

 

Share This

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *